Para qué saber...

La cosa es que tuve un flash back, porque fue sobre la primera vez que me besaste y me dijiste.... piensa que es un sueño, tuve las mismas sensaciones, de dolor de guata y a la vez pensar: qué pedante!!! se creerá mino y hohohohohahahaha, pero la verdad que cuando desperté fue más o menos triste porque sentí que en verdad todo había sido un sueño, como si todos estos años hubiesen sido un sueño malo, bueno, un poco largo. La verdad es que siento todo tan lejano. La otra vez que fui al Gimpert, me paré un rato a ver las escaleras cerca de los ascensores y trataba de recordar sensaciones, porque las situaciones las recuerdo, aunque como algo bien distante y ajeno, pero las sensaciones las tuve algo bloqueadas por años, la verdad fue prácticamente imposible asumir sentirme como una niña, que fue tan feliz comiendo una empanada de queso, mirándose en los ojos de su amado. Fue posible tanta sencillez y tanta felicidad?? o sólo quería que así fuera, o me estaba forzando a recordar de esa forma tan idílica esos años iniciales juntos... No sé la verdad, pero fue tristemente bonito cavilar que algún día alguien me hizo tan feliz y que yo tal vez también pude provocar aunque fuese de manera momentánea felicidad en alguien. Que no se me malentienda, no significa que no haya vuelto a vivir felicidad de nuevo, pero son otros aires, sin la inocencia y sencillez de antaño.

Sicalíptico...

Esta noche se ha vuelto cadenciosa, tus labios sicalípticos me han sugerido... lo innombrable.
Soy tuya en este cuarto ante los ojos culposos de los grillos, las espinas heridas de nuestros cactus... La lluvia empezó a caer por nuestras sábanas blanquecinas de cal y y hueso.
Soy tuya esta noche, demasiado obvio, sólo sé que soy tuya esta noche.